Viva la Zona de Confort

Personalidad«O te distingues o te extingues», «El mayor riesgo es no arriesgar», «Reinvéntate», «Sal de tu Zona de Confort»,… Constantemente estamos leyendo y oyendo cosas parecidas. Seguramente yo las he utilizado algunas veces. No digo que no tengan parte de razón, pero quizás se están sacando las cosas de quicio. A veces me suenan como una especie de huida hacia adelante. Es algo así como, «no tengo ni idea de lo que tengo que hacer, así que haré cualquier cosa simplemente para tener la sensación de que estoy en movimiento».

Quizás la respuesta no está fuera, en la hiperactividad, en la búsqueda de lo ultimísimo, en subirse al carro de la última moda, en hacer el n-Master o en tratar de identificar lo que quieren los demás. Puede que simplemente tengamos que buscar en lo que tenemos más cerca, en ese personaje que ves cuando te miras al espejo.

Cada día aparecen cosas nuevas, o más bien sólo lo parecen porque suelen ser lo de siempre con otros nombres. Así que podemos ir con la lengua fuera para estar al día de algo que posiblemente tenga una vida muy breve o, por el contrario, podemos buscar cosas más sólidas y permanentes aunque quizás menos atractivas o «modernas». Pero parece que si no estás «a la última», eres uno de esos pringaos que prefieres mantenerte en tu Zona de Confort.

Digo esto porque una de las cosas que he descubierto en los años en los que llevo trabajando por mi cuenta es que cuando mejor me va es cuando me centro en lo que me gusta, cuando escribo o aprendo sobre lo que me apetece en lugar de dedicar demasiado tiempo a analizar tendencias, nuevas herramientas o necesidades volátiles. Hace ya bastante tiempo que dejé de preocuparme del último juguete dospuntocero, la técnica de gestión «que hay que conocer» o la «supernova» mediática de la que todo el mundo habla.

Todos los días nos ponen ejemplos de personas que han cambiado radicalmente sus vidas, que han dejado una profesión «seria» para convertirse en fotógrafo, gurú de yoga o a para dar la vuelta al mundo. El problema es que si son noticia es porque esas suelen ser las excepciones. Si eso fuese lo habitual no se utilizarían como ejemplos. Te ponen el caramelo en los labios y si no lo consigues te sentirás peor, culpable o inútil. Primero te generan la necesidad y luego te ofrecen la solución y si no lo consigues la culpa es tuya. Por eso existe la autoayuda.

Durante los años que llevo trabajando en esto de la Marca Personal he comprobado que la mayoría de la gente está a gusto con lo que hace aunque posiblemente le gustaría un pequeño cambio. Así que en lugar de pensar que la solución es hacer algo radicalmente diferente (o morirte como suelen decir muchos) quizás la respuesta está en volver a disfrutar de lo que haces y tratar de hacerlo mejor.

Creo que nos pasamos demasiado tiempo tratando de contentar a los demás. Esto se ha puesto peor por culpa de las Redes Sociales y la necesidad de recibir el beneplácito de otros en forma de seguidores, fans, «amigos» y «me gusta». Lo cierto es que la primera persona a la que debemos hacer feliz es a nosotros mismos.

Si hay algo que tiene de bueno dospuntocerolandia es que, en lugar de buscar a aquellos en los que puede encajar lo que ofrecemos, podemos atraerles si somos capaces de ser buenos en «lo nuestro» y de comunicarlo adecuadamente porque «hay gente para todo». Por lo tanto, en lugar de obsesionarse con buscar cosas raras, de reinventarse hacia ninguna parte o de llamar la atención en todos los Medios Sociales quizás sería más útil y más sencillo centrarnos en lo que nos gusta y en lo que sabemos hacer bien… que curiosamente suele estar relacionado.

Cuando te dedicas a lo que te gusta (eso que llaman ahora Pasión) te vas a sentir mejor, más motivado y eso se nota cuando dejas tu Marca Personal. Está claro que lo difícil es identificar lo que te interesa, lo que te gusta. Pero la solución está en reflexionar, en pensar en nosotros mismos en lugar de estar disparando a todo lo que se mueve. Piensa que tu Zona de Confort es la Zona de Disconfort de los demás, así que ¿Porqué no defender el terreno que conoces?

Puede que la solución no esté en salir de la Zona de Confort sino en sentirse todavía más «confortable» dentro de ella y sacarle todo el jugo. Esa es la auténtica reinvención o diferenciación, lo demás es transformismo (cambiar rápidamente de indumentaria para interpretar distintos personajes).


Cuando haces lo que te apetece en lugar de tratar de contentar a todo el mundo o de transmitir la sensación de que eres alguien hiperactivo y en movimiento constante vas a conectar mejor con quienes son como tu. Si estás todo el día cambiando es difícil que alguien sintonice contigo. Es cierto que nos gustan las novedades pero también lo es el que confiamos más en aquello o aquellos que sabemos que no nos van a dar sorpresas.

Podemos pasarnos toda la vida picando de todo lo que nos presentan y dando la sensación de que no paramos o podemos dedicarnos a ser los mejores en lo nuestro, en lo que nos gusta de verdad (aunque no esté de moda). No digo que no haya que aprender y mejorar cada día pero sobre algo sólido, sobre aquello que nos interesa en lugar de empezar de cero constantemente simplemente porque no le hemos dedicado el tiempo y esfuerzo necesario a «lo nuestro» para sacarle todo el jugo.

Quizás no se trata de salir de la jodida Zona de Confort sino precisamente de mantenerse dentro de ella y hacerla cada día más grande para no tener que escapar… porque fuera hace mucho frío.

Como leí en un tuit hace unos días: «Me ha costado mucho crear mi Zona de Confort como para salir ahora de ella.»

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